
- El vestíbulo, en cuyo fondo se abren la uretra y la vagina
- Los labios
- Labios mayores
- Labios menores
- El pubis o monte de Venus
- El clítoris
- Los bulbos vestibulares o bulbos vulvares, un par de cuerpos eréctiles anexos
- Las glándulas de Bartholin o glándulas vestibulares mayores, un par de glándulas anexas, y las glándulas de Skene
Labios (genitales)

Los labios menores también son sensibles y pueden hincharse durante la excitación sexual. Se localizan dentro de los labios mayores y van de la capucha del clítoris hasta debajo de la vagina rodeando los orificios de la vagina y la uretra. El orificio de la vagina recibe el nombre de introito y la zona con forma de media luna que se encuentra tras ese orificio se conoce como horquilla vulvar. A través de diminutos conductos que están situados junto al introito, las glándulas de Bartholin, cuando son estimuladas, secretan un flujo (moco) que lubrica la vagina durante el coito.
Pueden variar de un color rosado a un café oscuro, según el color de la piel de la mujer. Igual que los pezones, los labios menores pueden cambiar de color cuando la mujer madura. Algunas veces sobresalen entre los labios mayores, y pueden ser arrugados o lisos.
Clítoris

Vagina
La vagina es el pasaje que conecta los órganos sexuales externos de la mujer con el útero, cuello y la vía por donde el bebé es conducido fuera del cuerpo de la madre en el parto. Es también donde el flujo menstrual sale del cuerpo y por donde el pene entra durante el coito
Secreciones y olores
Durante la pubertad, la vagina comienza a producir una secreción que puede ser incolora o blanca: la leucorrea. De esta forma, la vulva se limpia a sí misma: las secreciones expulsan los gérmenes y otras sustancias indeseables cuando se está ovulando.
En la excitación sexual, la vagina produce una secreción transparente, considerada un lubricante natural.
En una mujer saludable, por lo general, el olor natural de su vulva no es desagradable. Si lo es, puede indicar algún desequilibrio, siendo recomendable el consejo ginecológico, pues puede ser señal de una infección vaginal, o incluso de una infección de transmisión sexual que se deba tratar inmediatamente.
Salud e higiene
En un esfuerzo para eliminar todos los olores y secreciones naturales, muchas mujeres y chicas abusan de duchas y desodorantes femeninos. La vagina se limpia a sí misma, los lavados excesivos pueden alterar el balance de su pH y la flora de bacterias útiles que se encuentran en la vagina y llegar a que la mujer contraiga vaginitis: inflamación de la vagina.
La salud de la vulva va ligada al modo de vida y conocimiento de cada mujer, el cuidado anímico personal, la alimentación sana, el ejercicio y la limpieza periódica con un jabón específico, muy suave, y abundante agua, aplicado con la mano siempre del frente hacia atrás.
Patologías
Algunas patologías de la vulva incluyen la vulvitis, liquen plano, neoplasias (condilomas asociados al VPH, la enfermedad de Paget vulvar y raramente el cáncer de vulva), aftas genitales y la eritema multiforme.
Los tumores de la vulva tienden a ser benignos, aunque puede presentarse un cáncer en la vulva:
Papiloma vestibular, por lo general asociado al VPH
Pólipos fibroepiteliales benignos
Condiloma acuminado, verrugas causadas por el VPH no oncogénico (cepas 6-11)
Hidradenoma papilifero, nódulos de las glándulas sudoríparas
Quiste epidermoide
Otras lesiones benignas
Lipoma
Hemangioma
Granulomas
Leiomioma
Neoplasia intraepitelial vulvar, displasias leves a moderadas con potencial a malignidad en estas avanzados
Carcinoma in situ
Cáncer de células escamosas, levemente invasor (1-2 mm de la superficie) o francamente invasor (más alejado de la superficie)
No hay comentarios:
Publicar un comentario